Raquel y Bancho acuden a nosotros en busca de asesoramiento para iniciar su andadura por el nuevo camino que han elegido. Han decidido cambiar la ciudad por el campo, y sus trabajos en oficinas de grandes edificios, por una antigua finca rústica propiedad de la familia de Raquel desde hace muchas generaciones.
La idea era rehabilitar toda la finca y poner en marcha un exclusivo negocio de alojamiento rural a 45 minutos de Madrid y 10 de Ávila capital.
La granja está situada en un entorno natural de ensueño, donde rocas de granito de las formas más diversas descansan en una pradera poblada de robles y encinas, por la que fluyen pequeños arroyos. Se oye el agua y los pájaros, nada más.
La imagen que creamos para este pequeño hotel es una identidad que transmite elegancia, limpieza y clase. Una imagen que utiliza los mismos elementos naturales del entorno para hablarnos de él, combinados con poesía y pasajes literarios de autores clásicos castellanos que nos hablan de naturaleza y espiritualidad.
Fuentes Claras es "El lugar imaginado". (El lugar imaginado).